Hoy, como todos
los 3 de mayo, se conmemora el Día Mundial de la Libertad de Prensa. En este
contexto el Sindicato de Prensa del Chaco no se resigna y ratifica que es
imposible garantizar la libertad de prensa con trabajadores precarizados y
explotados, como ocurre en toda la provincia especialmente, en los medios
audiovisuales y en particular en el interior provincial.
Muestra de ello
son los casos de Radio Chaco y el de LT16 de Sáenz Peña (ex radio Esmeralda).
En el primer caso, esta semana los trabajadores decidieron “silenciar” la
emisora en reclamo de la actualización de los salarios, los cuales están muy
por debajo del convenio, sin los aportes correspondientes de aportes y
contribuciones y viven sufriendo ante el riesgo constante de perder su fuente
laboral. En cuanto a LT16, la misma sigue sin registrar a los trabajadores de
Prensa a pesar de los acuerdos firmados en la cartera laboral y ni siquiera
respetaron los compromisos asumidos en este sentido con el propio gobernador,
Jorge Capitanich. Ambas emisoras además tiene sus respectivas licencias en
situación irregular y aún así continúan cobrando pauta oficial.
Es por eso que
insistimos en la necesidad de implementar la Ley de Servicios de Comunicación
Audiovisual sancionada en 2010 y que, a pesar de tener trabas legales en
algunos de sus artículos, está en plena vigencia y garantiza la pluralidad de
voces y por ende la libertad de expresión.
Recordamos
además que la prensa en Argentina, y especialmente en el Chaco, tiene un marco
legal garantista para el ejercicio periodístico, a los derechos y obligaciones
(el Estatuto del Periodista Profesional -Ley 12.908- y el Estatuto del Empleado
Administrativo de Empresas Periodísticas - Ley 12.921), que a su vez funciona
como un “paraguas legal” para todos los convenios colectivos de trabajo
argentinos en prensa. Sin embargo, en el caso del Chaco, el convenio N° 189/75
del sector escrito y el 173/75 de los medios audiovisuales no pueden ser
cumplidos y aplicados en su totalidad por la irregularidad y precarización que
sufren los trabajadores. Es así que insistimos en que esta situación complica el
ejercicio seguro de la profesión, hablar sin riesgos y la libertad de expresión
y así termina no siendo absoluta en los medios del Chaco.
Por lo tanto,
ratificamos nuestro reclamo a los tres poderes del Estado la aplicación del
marco laboral que regula la actividad en los medios de comunicación en la
provincia, para que se terminen así situaciones al margen de la ley.
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